A veces cuando hablo con mis amigas les pregunto “¿sigues vivaaa?” para referirme a si siguen despiertas, pero qué horror pensar en que una pregunta tan inocente encierra una realidad social monstruosa.
Marcha Feminista 8M en Monterrey, Nuevo León. Foto: Dania González
Es por eso que estoy harta de que los medios hagan notas desacreditando el movimiento feminista cuando ellos son los mismos que difunden el cuerpo desollado de Ingrid Escamilla, pero tapan la cara de su feminicida. Estoy harta de que cuando alzamos la voz acerca de que nos están matando a diario, sea visto como un “desvío” de lo que, a nuestro presidente, sí le parece importante. Estoy harta de la indiferencia e incongruencia del país ante la situación.
Estoy harta. ¿Hasta qué punto tenemos que llegar para que se nos garantice la seguridad y justicia que tanto pedimos y necesitamos?, ¿cuál va a ser la acción que conmocione a este país indiferente e insensible?
Marcha 8M en Monterrey, Nuevo León. Foto: Kevin Hernández
México, date cuenta que eres un país feminicida, que no piensas en nosotras como seres humanos, solo nos ves como objetos con los que puedes hacer lo que te dé la gana. Pero no más, tu indiferencia no nos detendrá. Aquí seguimos de pie, luchando más fuertes y decididas que nunca. Porque no estamos completas, nos faltan Fátima, Ingrid, Joselyn y miles más; todas con nombre, con su propia historia y su alma y vida que les fueron arrebatadas. Estamos aquí, de frente, sedientas de justicia y aquí seguiremos hasta conseguirla.
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